El video presenta a una chica joven e inocente con tetas pequeñas que es castigada por la policía por hurtar en la tienda. La cámara la capta tumbada en el suelo, con las piernas abiertas y las manos apretando los asideros de la máquina. Mientras espera su liberación, el oficial entra en la habitación y la encuentra en proceso de complacerse. Luego, usa sus esposas para confinarla en el vestuario, donde la saca y comienza a provocarla.